RAJOY EN TVE: NO TOCARÁ LAS PENSIONES

En la entrevista de anoche a Mariano Rajoy en Televisión Española, con seis periodistas de diversos medios pero próximos al PP, estuvo mejor el Presidente que los propios periodistas.

Lo novedoso es que no hay novedad. Con la canción del verano de que “no se puede gastar más de lo que se tiene” se quedó tan pancho, cuando la mayor parte de los españoles ya no tiene dinero suficiente para gastar y tampoco los bancos dan créditos, los toman de nuestro bolsillo. Más exáctamente los bancos y cajas lo toman del presupuesto que debía destinarse a sanidad, a educación, a desempleo, a servicios sociales y a las pensiones.

Anunció, eso sí, subidas de impuestos sobre las plusvalías y otros nuevos con la etiqueta de “ecológicos” o “verdes”. Pero no ha aclarado si congelará las pensiones, ni ha despejado dudas sobre si aplicará más recortes a los funcionarios y a los parados, cuando desde prestigiosos periódicos nacionales y extranjeros se da como seguro que es lo único que España puede ofrecer para que Europa nos “rescate”. Dijo que “no tiene intención de tocar las pensiones en este momento” y eso ya sabemos lo que quiere decir: Que las tocará después de las elecciones de Galicia y el País Vasco.

De lo que más ha sacado pecho, Mariano Rajoy, ha sido de la Reforma Laboral, afirmando que “ha sido buena” para el país. Y eso puede ser cierto: Casi 800.000 parados en lo que va de año, que se lo ha currado él solito y sus gobiernos autonómicos. Ni una sola medida para crear empleo, solo recortes, despidos masivos de funcionarios y leyes laborales que sonrojarían al mismísimo Franco.

Sobre el rescate de la deuda del Estado que nos ofrece el BCE, Rajoy por primera vez lo ha llamado “rescate”, se ha negado a responder diciendo que lo está estudiando porque todavía no sabe que hacer y porque necesita más tiempo y no se puede “frivolizar”. Ni lo pide, ni sabe cuándo , ni contesta. Y, por cierto, nuestra deuda pública del Estado sigue siendo menor que la de Italia, Inglaterra, Francia y Alemania. El problema, principalmente, está en la deuda privada que todos los españoles tenemos con bancos y cajas de ahorros, y estos últimos con los extranjeros que les facilitaron las hipotecas "sub-prime". Por eso los "mercados" saben el agujero real existente y se lo quieren cobrar con la deuda pública.

Por desgracia, según todos los analistas económicos el “rescate” o “secuestro de la soberanía nacional” no puede demorarse más. En pocos meses ya no habrá dinero en caja, salvo el de las pensiones, al no entrar vía impuestos porque la actividad económica está paralizada. Y aunque el BCE pueda comprar bonos, aparte de los mercados, es por tiempo limitado y a cambio de solicitar la intervención total y absoluta de nuestra economía, es decir, lo que diga Berlín.

Por último, el presidente Rajoy echó la culpa en varias ocasiones a la herencia del 8,9% de déficit en 2011 que recibió del anterior Gobierno, frente al 6% que el PP tenía previsto. "Cuando la UE se enteró del desvío, eso hizo mucho daño a España", afirmó. 

Poco se molestó en decir que todas las autonomías que gobernaban, como Madrid o Valencia, se excedieron en el límite del gasto pactado, sumando un 3 % a ese déficit global. Dato que el gobierno central no podía conocer hasta principios de 2.012, que era cuando las comunidades autónomas debían presentar sus cuentas finales, pero que el PP  sí que sabía, porque era quien las gobernaba y ocultaba las cifras, como se demostró posteriormente.

Hasta aquí el resumen de urgencia. Tampoco hay más que destacar , salvo que “No tenía ningún interés” sobre tocar las pensiones y que “los pensionistas serian tratados de la mejor manera posible".

CONCLUSIÓN: Si no hay créditos para empresarios y autónomos; si no hay préstamos para comprar viviendas; si se disminuyen los ingresos de funcionarios, trabajadores y pensionistas; si se despide masivamente y de forma gratuita; y si nos suben impuestos como el IVA y la contribución urbana (IBI), el consumo se restringe y cierran más empresas y más trabajadores a la calle. Imposible de esta manera obtener más ingresos, y sobre menos gente, e invertir para que circule el dinero. El mundo al revés.