MODERACIÓN Y CENTRISMO EN EL PP

Anunciado el adelanto de las elecciones generales para el 20 de Noviembre por el presidente del gobierno, José Luis Rodriguez Zapatero, no tardó Mariano Rajoy en prometer un gobierno del PP con “moderación, diálogo y centrismo”.

No hay mejor prueba de ello que, acto seguido, millares de militantes del PP se lanzaran en internet a emitir su júbilo ante el “insulto del PSOE” de convocar elecciones, como en la página web del PP de Massamagrell.

Repasando los periódicos digitales , los del coro medíático que cobra por aplaudir al PP, vemos cuán moderados y centrados son:

Isabel San Sebastián, famosa conferenciante invitada tantas veces por el Ayuntamiento de Massamagrell dice en EL MUNDO: “ la fecha en la que vamos a conmemorar tiene dos defunciones ruidosas: la desaparición física del dictador que durante tantos años mantuvo a España marginada de Europa y la muerte política del presidente que la trituró”. Para más moderación añade que ““la Historia ya ha juzgado a Francisco Franco y ve en él muchas más sombras que luces, en cambio cuando le llegue el turno a Zapatero será difícil hallar un solo destello que alumbre la infinita negrura de su mandato. Desde Fernando VII, el rey felón, no había sufrido esta pobre Nación semejante flagelo de incompetencia y traición”.

La emisora de los obispos, LA COPE, lanzó un editorial donde se festejaba el “adiós a Zapatero” y que “la noticia que llevamos meses esperando ha llegado “ . Como si fueran unos santos arremeten reflejados en sus propias gafas: “Con esta noticia se produce el punto final de una etapa de ruptura de consensos básicos, de radicalización ideológica y de parálisis económica.  Zapatero ha jugado a ser un político iluminado y mesiánico, dividiendo a la sociedad española como ningún otro Presidente en nuestra joven democracia. Su torpeza frente a la crisis y sus prejuicios ideológicos han hecho que perdiera su encanto incluso entre los más partidarios. Ahora la sociedad española tiene la palabra”.

Por otro lado, el excomunista Fernando Sánchez Dragó , ahora pedófilo declarado y anteriormente estómago desagradecido de la televisión de Felipe González, publica en ELMUNDO: “alabado sea el Señor que las campanas tocan a rebato y a gloria y saben, además, a ella “. Advirtiendo que sería una “catástrofe” que Rubalcaba ganara en tal fecha.

En la web de Federíco Jiménez Losantos se afirma “mucho y muy malo es lo que ha hecho Zapatero pero muchísimo peor es lo que no ha hecho, lo que, tras perder año y medio, deja sin hacer”. Y tacha de “hediondo”, “desacreditado” o “de risa” su Gobierno. Aparte de otros insultos.

El mismo blog de Fede, otro excomunista resabiado, sale Pío Moa, exterrorista del GRAPO y ahora historiador del PP, para que sentencie que “el balance de Zapatero en el poder es una mamarrachada de cotorra, no por grotesca menos peligrosa”. También sale Alcaraz, mártir de la AVT a sueldo del PP , para que le defina como “el presidente del talante con la ETA”.

Todos los demás medios afines al Partido Popular se han desatado con frases por el estilo, que no han dejado de propagar diariamente a lo largo de estos últimos siete años.

Pero, ¡qué coincidencia, aquí también hay playa!. Por nuestro pueblo pululan en tiendas y panaderías los habituales voceros del PP, antes ex-comunistas redomados, despotricando a diestro y siniestro con el “20-M” , Zapatero y Rubalcaba. A una, que se decía comunista de toda la vida, le arreglaron la paga los socialistas y Zapatero la ha triplicado la viudedad, a otro lo tiraron a patadas del PCE por..... y un último se afilió por unos días al PSOE (hace 30 años) a ver si le daban el reparto de sobres del Ayuntamiento que no consiguió. Todos ellos, y algunos más, son los que más ladran por la calle. Por supuesto nunca se les dejó entrar en el PSOE, por eso pasaron directamente de la “extrema” izquierda a la extrema derecha.


Para variar , el risueño portavoz del PP, Esteban González Pons, anuncia que no van a utilizar «el estilo Rubalcaba» para la campaña electoral: «Vamos a hacer una campaña sin espías, sin trampas, insultos ni sobresaltos».

Eso, parece que no es insultar. Eso es moderación, diálogo y centrismo.


Nota: Esos excomunistas en realidad nunca lo han sido. Son los clásicos que van de partido en partido a ver lo que sacan, pero son los que más chillan.